En los momentos de huelgas y paros previos al 1er. Año del Gobierno de Alan García, mientras todos los medios de comunicación sometidos al gobierno de turno, cumplían con su campaña de demolición contra quienes protestaban, una vez más César Hildebrandt desde su humilde tribuna en la radio y a través de internet comentaba lo siguiente:
Ahora resulta que todos los paros son subversivos, que están financiados por Venezuela, vienen directamente desde Caracas, casi del Orinoco y nadie sabe, yo tampoco cómo es que Hugo Chávez puede encender la pradera en el Perú telescópicamente tan lejanamente y con tanta eficacia, desde luego que ésto es una monserga, estas son pamplinas, Chávez no tiene que ver con el asunto y quien tiene que ver con el asunto evidentemente es el gobierno que llegó con los votos de la izquierda y manejó el gobierno con la mano derecha. Llegó con los votos del descontento y en seguida a las 24 horas asumió inmediatamente el Plan de Gobierno de Lourdes Flores que era su adversaria política y a quien había tildado de derechista impresentable y todo lo demás, es decir que, habría que instaurar el asunto notarial en la política peruana, habría que prometer ante notario y desde luego vérselas después con los fedatarios. Es decir, con aquellos que presenciaron las promesas, que es el pueblo y con aquellos a quienes se defrauda sistemáticamente y que luego tienen perfecto derecho de plantear sus protestas.
Nadie está justificando violencia, desmanes, vandalismos, pero la protesta tiene una legitimidad absoluta.
En el caso de Apurímac por ejemplo, la carretera que se prometió con un costo de 800 millones de dólares a lo largo de 5 años, hasta el momento tiene de inversión de 15 millones, no gastados porque son 15 millones para el estudio de factibilidad final.
Es una burla pues. O sea va el Presidente en campaña y dice: nosotros vamos a hacer esta carretera por 800 millones al cabo de 5 años, ha pasado un año y no han gastado un solo centavo en la obra, pero sí han gastado 15 millones teóricos en el estudio de factibilidad.
Y quieren que los apurimeños digan:
Sí señor… sí señor… cómo no señor… seremos los engañados de siempre, secularmente engañados, crónicamente engañados, cómo no señor García, siga Ud. engañándonos...
Y toda esta prensa aterrorizada... estaba escuchando anoche a una señora en la televisión que decía: …nosotros que creemos en el Perú y en la reconciliación…. Hombre, crea Ud. En la justicia y no en la reconciliación timorata del poder del dinero, no se venda Ud. tan impúdicamente al poder del dinero, no sea Ud. tan macabramente impúdica.
Y, en la mañana escuchaba a una señorita en la radio más importante del país diciéndole a un diputado apurimeño “…pero no se trata de azuzar, la Ministra ha dicho que…”. Parecía la vocera gubernamental. Parecía la portavoz de todo aquello que está asustado y que desde luego, desde el susto sataniza, demoniza y trata de descalificar a todo el mundo diciendo:
“…éste esta comprado por Chávez… el otro es un títere de Humala, el otro es un payado de Diez Canseco… el otro está envenado por no sé quien… el otro perdió las elecciones… y todos son unos picones …”
Como dice el señor Presidente Alan García: picones y criticones.
Oiga Ud. Señor Presidente ya quisiera Ud. tener una pizca de autocrítica porque así podría verse en el espejo tal como es: o sea, un olímpico mentiroso. En las olimpiadas de las mentiras señor Presidente. Ud llegaría primero pero también segundo. Se llevaría la medalla de oro y también la de plata.
No tengo la menor duda.
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